INFECCIONES: COMO AFRONTARLAS DE UNA MANERA NATURAL

La prevención es mejor que la cura. Los investigadores médicos están hallando cada vez más pruebas de que sólo sucumbimos a los patógenos cuando nos agotan; así que la mejor defensa es mantener el sistema inmunológico sano y fuerte para que esté preparado cuando llegue el invasor. Invasores hay muchos, bacterias, virus, hongos, gérmenes... Cada uno de ellos requiere un tratamiento diferente. 

Los nutrientes que revitalizan el sistema inmunológico son buenos todo el año, especialmente si estamos agotados o expuestos a personas con infecciones. Durante una infección, tanto el invasor como nuestra sistema inmunológico producen radicales libres para destruirse mutuamente. A través de los nutrientes antioxidantes, podemos frenar la proliferación de estas sustancias tóxicas. 

La mejor defensa es el ataque y cuanto más rápido entre en acción más oportunidades tandremos de restaurar la salud antes de que se produzca una infección. Todos los invasores producen toxinas como parte del arsenal que llevan. Si por ejemplo nos despertamos sintiéndonos más cansados de lo normal, con ojos inyectados en sangre, dolor de cabeza, picazón en la garganta, nariz tapada o mente nublada, probablemente estemos siendo invadidos por patógenos. El cuerpo está intentando eliminar un agente que no es bienvenido.

Cuando tenemos fiebre, el sistema inmunológico funciona mucho mejor. Hay que procurar mantener el calor coporal. Los antitérmicos se utilizan muy a la ligera cuando tenemos lo que llamamos febrícula. No se aconseja suministrar el antitérmico cuando el cuerpo sube un poco la temperatura, ya que impediríamos que nuestras defensas naturales trabajen óptimamente. Requiere dejar que la fiebre actúe y descansar mucho. 

Durante una infección hay que escuchar al cuerpo. No pasa nada por no comer durante un día. Si la infección perdura, entonces hay que reconstituir al organismo con nutrientes revitalizantes y proteínas. Lo aconsejable es comer poco comidas ligeras hechas de alimentos naturales con mucha energía, crudos o poco cocinados. También hay que beber mucha agua e infusiones para ayudar al cuerpo a desechar toxinas. Evitar la sal y alimentos grasos que producen moco como la carne, huevos y lácteos.

En resumen, los siguientes pasos nos ayudarán a hacer frente a diferentes tipos de infecciones:

* Comer en cantidades moderadas, sobretodo proteínas necesarias para desarrollar células inmunológicas, y mantener la temperatura corporal. Si tenemos infección de vía respiratoria con excreción mucosa, evitar los lácteos.

* Aumentar dosis de Vitamina C de 1 a 3 gramos al día.

* Tomar infusión de Uña de Gato (Uncaria Tormentosa) y añadir jengibre rallado, gotas de Equinácea Angustifolia y cápsulas de diente de ajo.

* Una cucharada sopera disuelta en zumo concentrado de baya de sáuco, dos veces al día en casos de resfriados o gripes.

* Si tenemos infección bacteriana, micótica o parasitaria, el extracto de semillas de pomelo es un buen remedio. Se recomienda 10 gotas 3 veces al día. 

LUCHADORES NATURALES DE INFECCIONES

Se suelen recomendar dos dosis: la primera sería para parar el ataque y la segunda, para establecer un mantenimiento general. Una vez que ha terminado la invasión, se espera 48 horas antes de empezar con la dosis de mantenimiento. No todos los remedios naturales tienen dosis de mantenimiento. 

VITAMINA A

Un gran nutriente revitalizador del sistema inmunológico. Fortalece piel, por dentro y por fuera, actuando como primera línea de defensa, manteniendo pulmones, aparato digestivo y piel intactos. Al fortalecer las paredes celulares mantiene a los virus fuera de las células. La vitamina A puede ser tóxica en grandes dosis. Niveles superiores a 10.000 UI sólo se recomiendan a corto plazo. 

ALOE VERA

Tiene propiedades revitalizantes para el sistema inmunológico, antivíricas y antisépticas. También es un buen tónico.

ANTIOXIDANTES

Sustancian que detoxifican los radicales libres. Los más importantes son las vitaminas A, C, E y betacarotenos, zinc, selenio.. Otras sustancias no esenciales como el picnogenol, ácido lipoico, bioflavonoides y extracto de arándano también son potentes antioxidantes. 

ARTEMISA

La Artemisa Vulgaris es una planta medicinal con acción antimicótica,. antiparasitaria y antibacteriana. Se usa muy a menudo con el ácido caprílico para el tratamiento de candidiasis o afta.

ASTRÁGALUS

El Astrágalus Membranaceus es una planta procedente de China, muy utilizada en su sistema  de Medicina Tradicional, muy célebre por sus efectos revitalizantes en todo el sistema inmunológico y por su alto contenido de mucopolisacáridos beneficiosos. 

BETACAROTENO

Es la fuente vegetal de la Vitamina A y uno de los principales antioxidantes. Los alimentos rojos, naranjas y amarillos, además de todas las verduras frescas, son las mejores fuentes. El zumo de zanahoria o sandía son ricas fuentes de este nutriente.

VITAMINA C

Potente agente antivírico. Los virus no pueden sobrevivir en un ambiente lleno de Vitamina C. Para conseguir esto, harían falta 3 gramos de Vitamina C justo después de una infección y luego 2 gramos cada 4 horas. 

La vitamina C no es tóxica, aunque en grandes cantidades podría causar descomposición. Se tendría que disminuir la dosis si la situación fuera extrema. 

POLEN DE ABEJA

Antibiótico Natural. Probablemente sea mejor como un tonificador general que como un tratamiento específico. 

ÁCIDO CAPRÍLICO

Agente antimicótico derivado de los cocos, utilizado normalmente para eliminar la Candida albicans, organismo responsable del afta y la candidiasis.

UÑA DE GATO

La Uncaria Tormentosa es una poderosa planta medicinal antivírica, antioxidante y revitalizadora del sistema inmunológico. Procede de la selva tropical del Perú. Contiene alcaloides, como el isopteridino, el cual es un gran revitalizador. 

OTROS EJEMPLOS DE SUSTANCIAS NATURALES COMO POTENTES ANTIVÍRICOS

VITAMINA E

EQUINACEA PURPÚREA O ANGUSTIFOLIA

EXTRACTO DE BAYA DE SAÚCO

AJO

JENGIBRE

GLUTATIÓN Y CISTEÍNA

SELLO DORADO (HYDRASTIS CANADENSIS)

EXTRACTO DE SEMILLAS DE POMELO

L-LISINA

CHAMPIÑONES JAPONESES

PROBIÓTICOS

HIPÉRICO (HYPERICUM PERFORATUM)

SELENIO

ACEITE ESENCIAL DEL ÁRBOL DEL TÉ

ZINC

COBRE (EN OLIGOELEMENTOS)

Seguramente me dejo muchos más potentes antiinfecciosos naturales. En general, vemos que dentro de nuestra botánica y alimentación, nos encontramos con soluciones preventivas y sintomáticas muy apropiadas para hacer frente a cualquier infección. En la medicina natural siempre hay que tener en cuenta que una buena prevención es la mejor cura que hay.