¿Existe la paz interna?

14.07.2023

La caída del ego

Hace pocos días, estaba estirada en mi cama y llorando como una magdalena. Justo en mi mesita de noche tengo un libro de crecimiento personal que me estoy volviendo a leer después de muchos años cogiendo polvo en la biblioteca de casa. Se trata de "El monje que vendió su Ferrari". Sé que en su día me fascinó y ahora, por alguna razón, el libro me llamó de nuevo para releerlo y volver a captar su esencia. Mi hija de 8 años vino a ver qué me pasaba. Me preguntó si estaba llorando por el "cuento del monje". Yo, en ese momento, y como solemos hacer los padres, le dí una respuesta que creí que quedaría liquidada la conversación in situ. Le dije que sí, que el monje lo que hizo fue dejarlo todo para irse al Himalaya a buscar el elixir de la vida y la paz interior. Y que la mama no lograba encontrarla... Mi hija, muy tranquila y confiada, me contestó: 

Mama, eso es sólo un cuento. La paz interior no existe. El mundo es así.... 

Y con las mismas, se giró y se marchó de la estancia... Os aseguro que las lágrimas me pararon de brotar al instante. Me quedé pensando en la respuesta de mi hija: ¿Y si tuviera razón? ¿Realmente, existe el estado de paz interior? Mi conclusión después de meditar, es la que expongo a continuación.



La espiritualidad exacerbada

Llevo muchos años en el camino de la evolución del Ser, en el camino de la templanza y el trabajo espiritual en la Tierra. Ya era bien jovencita cuando se despertó una parte de mí que me hacía diferente. En los últimos años, han habido modas sobre lo alternativo, lo místico, el autodescubrimiento, la meditación... Nos llega multitud de información variada sobre el trabajo interior, la meditación, el séptimo chakra y su apertura, el tantra, danza energética, sanación energética, registros... Y es genial porque a fin de cuentas hemos entrado en la Era Acuario, y es la Edad de la espiritualidad y del colectivismo humano. Pero, ¿donde está la línea roja que separa todo este abanico de posibilidades de crecimiento con el que representa cada uno en su propia realidad? 

Retomando el tema de la paz interior, pienso que sí se puede conseguir vivirla en Momentos determinados de la vida. En concreto, estados de bienestar y tranquilidad, he vivido ciertos a lo largo de mi vida. En tiempos muy cortos. ¿Porqué? Porque para tener paz interior constante se ha de hacer un trabajo con la mente muy Grande!! Sí! Eso es! El dominio de la mente es clave para ello. Y me pregunto ¿cuantas personas en el mundo dominan su mente de tal forma que vivan en paz interior constante?.... 

La experiencia humana es dolorosa, pero no tiene porqué darnos sufrimiento. Eso lo decía Gautama Buddha. El hecho est´á en que cada día se ha de trabajar más en la mente, en la calidad de nuestros pensamientos, y por tanto, en la calidad de nuestras emociones. No nos engañemos. Nuestro ego, esa identidad con la que vinimos y nos sentimos identificados, nos boicotea constantemente. Y eso, por supuesto, no nos produce ninguna clase de paz ni nada parecido. 

Para mí la paz interna es saber perdonar. Sobretodo a unx mismx. Me explico.

Desde los 19 hasta los 23 años estuve en una relación tortuosa, con humillaciones y maltrato psicológico. Me perdoné haberme creado esa realidad. y Por tanto, perdoné al verdugo.

A los 24 años conocí a mi fractal. Era la persona perfecta para hacer un camino juntos. Estuvimos breve tiempo. Luego me dejó y se inició un periodo donde puso en jaque mi autoestima. Huyó de mí como si le hubiera hecho mucho daño. Me costó unos dos años desapegarme de esa relación. Simplemente no entendí lo que había pasado. Después se casó con una compañera de trabajo que yo conocía. Fue una decepción por la forma que ocurrieron las cosas. Me perdoné haberme creado esa situación dolorosa. Los perdoné y entendí el proceso. Todo es perfecto..Nada sucede por error.

Cogí tuberculosis pulmonar con 25 años. Casi no lo cuento. Trabajaba en una empresa donde los jefes me gritaban, humillaban y me trataban con desprecio. Me recuperé de todo a los 6 meses. Me perdoné por haberme creado ese ambiente tóxico en mi vida. Los perdoné y liberé.

De mi infancia me he perdonado muchas cosas que me atraje sobretodo, en lo que se refiere a dramas familiares. Están perdonadas y liberadas.

Personas destructivas han seguido llegando a mi vida. Decepciones durante años. Trabajos precarios en sueldo y calidad humana. 

Todo me lo he perdonado. Y lo he perdonado y liberado.

Eso es lo que realmente me ha producido mi verdadera Paz Interior.

Sigamos disfrutando de la experiencia de vivir, con sus desafíos, sus crudezas, y también de sus alegrias y de sus momentos extraordinarios que cada uno de nosotrxs podemos crear y convertir en nuestra realidad.

La paz interior comienza cuando decides que no permitirás que las personas o las circunstancias controlen tus emociones. Pema Chodron.